EL DOLOR EMOCIONAL
Ya lo dicen las canciones y los poemas: el amor duele. Pero ahora, gracias a la nueva tecnología, los científicos están confirmando que el sufrimiento emocional realmente puede doler físicamente.
Las nuevas investigaciones cerebrales revelan que la misma parte del cerebro que procesa el dolor físico también se encarga de procesar el dolor emocional.
Y esto explica, afirman los expertos, que de la misma forma como una lesión física puede causar dolor crónico, mucha gente nunca se recupera de una herida emocional.
El dolor emocional, sabemos, puede adquirir muchas formas. Puede ser el rompimiento de una relación, la exclusión social, o la forma más extrema que es la pérdida de un ser querido.
Muchas personas que han experimentado este tipo de dolor extremo a menudo hablan de “un dolor en el pecho”, “un vacío debajo del esternón”, o de pensar que se están volviendo locos por tanto dolor.
“La gente que ha sufrido daños emocionales a menudo traduce ese dolor en algo físico”,
Sin duda uno de los dolores más difícil de identificar y soportar y de los más frecuentes, es el dolor emocional.
Por lo regular la persona que lo padece, trata de ubicarlo en alguna parte del cuerpo. Por lo general se dice que duele el corazón, porque se ha representado a éste como la sede de los afectos, pero en realidad no sabemos bien dónde duele adentro del cuerpo, es un dolor difícil de ubicar, porque lo cierto es que más que un dolor, es una sensación de malestar difícil de explicar.
Es más fácil expresar me duele el corazón a me duele algo y no sé ni qué ni dónde", manifestó la Dra. Vanessa Nahoul, Doctora en Psicología Psicoanalítica y coordinadora de la Comisión de Enlace Internacional del Instituto de Investigación en Psicología Clínica Social (IIPCS).